El confinamiento de millones de españoles por la crisis sanitaria del coronavirus hace que tengamos que llenar las horas del día con numerosas actividades para no caer en el aburrimiento. Pero algunas de ellas pueden provocar nuevamente situaciones de alerta dentro de unos meses.

Esto precisamente es lo que empiezan a advertir representantes de maternidad desde diversos hospitales. «No podemos ponernos a follar todos de golpe, porque sino, dentro de 9 meses vamos a colapsar el área de maternidad de los hospitales», alerta Javier Muñoz en su cuenta de Twitter. «Hay que organizarse por turnos y no dejarse llevar por el pánico».

Si bien es cierto que la venta online de preservativos se ha disparado desde que se decretase el estado de alarma, «no hay que bajar la guardia y creerse expertos en la marcha atrás» aseguran desde el Ministerio de Sanidad. «En esos momentos incontrolados, un desliz lo puede tener cualquiera y estamos viendo que nos vais a dar las navidades a este ritmo».

Las recomendaciones pasan por establecer un calendario tanto diario como semanal para así mantener el tiempo ocupado «y no estar todo el día pensando en lo mismo, que parecéis enfermos». Leer, cocinar, limpiar la casa o teletrabajar son actividades que pueden igualmente ser disfrutadas en pareja «sin necesidad de andar persiguiéndose por toda la casa como animales en celo como si no hubiera mañana».

La primavera la sangre altera

El cambio de estación no va a ayudar demasiado para contener el nivel de feromonas de las parejas, especialmente entre las más jóvenes. Los expertos recomiendan no prestar demasiada atención a la época del año, por ejemplo viendo series como Doctor en Alaska, Viaje a Groenlandia o The Rain. «Así se baja un poco el calentón también», mantiene la psicóloga Carmen Ciendo.

«El personal sanitario de este país está haciendo un esfuerzo titánico en la batalla al coronavirus, pero no podemos provocar otra crisis dentro de 9 meses. Seamos responsables, no salgamos de casa, pero por favor, lo de mojar el churro mejor para cuando volvamos a la chocolatería», argumenta.