Un tatuaje de la Cultural Leonesa pudo iniciar la polémica
Verónica Tedral de León, ha denunciado por “incitación al odio y discriminación” a dos facultativos del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid. Verónica Tedral aún llevaba la bata de hospital (abierta por detrás) cuando acudió ayer a la comisaría de la calle Trilla de la capital castellana.
«Estaba muy alterada», nos cuenta uno de los agentes, «entró en comisaría más enfadada que las señoritas de Avignon con Picasso después de pintar el cuadro».
Verónica Tedral acudió ayer al Hospital Río Hortega para ser operada de una dolencia en la cadera. La hicieron pasar a la sala de espera y cuatro horas después la llamaron para ser atendida. Todo parecía normal. Hasta que avisaron al anestesista para aplicarle la anestesia epidural y el facultativo se negó a realizar la intervención.
«No es posible practicar la analgesia epidural si tienes un tatuaje en la zona lumbar y ese es el caso de esta paciente», se defiende el anestesista.
Hinchas del Real Valladolid
«No han querido atenderme por ser leonesa», denuncia Verónica, «y por llevar tatuado el escudo de la Cultural», denuncia Verónica. «Al médico y al anestesista esos les conozco yo de verles animar al Pucela», añade, «y ellos me conocen a mí».
Por su parte, los dos sanitarios admiten haber reconocido a la leonesa pero niegan que no la hayan atendido por su “leonesismo”. «Nosotros nos debemos a los pacientes», comentan tratando de zanjar el asunto mientras intentan esconder sus propios tatuajes: unos dibujos en la piel de unos sospechosos tonos blancos y violetas.