La sonda "Cazurrer" ha captado las primeras imágenes.
Científicos integrantes de la misión Legio VII, enviada el pasado mes de abril a explorar más allá de las fronteras leonesas, han conseguido constatar lo que ya se venía intuyendo meses atrás; la existencia de vida inteligente en Valladolid y su entorno. Así lo han confirmado esta misma mañana fuentes de la Agencia Provincial de Investigación Extraterritorial (APIE) tras la llegada del vehículo DiscoverCyL a la capital pucelana.
«No estamos solos. Era algo que ya nos imaginábamos pero por fin podemos asegurarlo con certeza. En Valladolid tienen casas, plazas, parques, luz, agua y hasta gente que vive y deambula por sus calles. Todos parecen bastante normales además» asegura Íñigo Tapioca, director de la misión que acaba de comunicar con la base central ubicada en el Palacio de los Guzmanes por vídeo conferencia tras el análisis de las primeras imágenes obtenidas por la sonda "Cazurrer".
La expedición consiguió alcanzar la ciudad en torno a las 00:30 h. de la pasada madrugada después de varias semanas cruzando el sistema mesetario de la tierra de campos. «Ha sido algo más largo de lo que esperábamos y en ocasiones también duro, especialmente a la altura de Medina de Rioseco, pues se nos había terminado la cecina y no quedó más remedio que alimentarnos a base de torreznos hasta que nos llegaron más provisiones.»
El sistema de abastecimiento energético del DiscoverCyL, diseñado y construido por el Área de Ingeniería Aeroespacial de la Universidad de León, ha conseguido optimizar la energía lo suficiente como para poder pasar 5 días en la ciudad y tener autonomía de sobra para la vuelta a León.
«A lo largo de estos días podremos investigar más profundamente las costumbres y el día a día de los pucelanos. Ya hemos mantenido los primeros contactos y parecen bastante receptivos para hablar, sobre todo cuando les ofrecemos chorizo, pero Íñigo está un poco preocupado porque en algún momento tendremos que sacar la bandera de León para mandarle unas fotos a Majo y no sabemos muy bien cómo van a reaccionar» explica Mamen Llamazares, integrante de la expedición.
Uno de los aspectos más importantes de la investigación pasa por constatar si se ha recuperado la normalidad en el Ayuntamiento de la capital, sobre todo tras el paso del anterior regidor que, pese a tener que vivir con el “sambenito” de llevar a León en su apellido, preocupó a los científicos provinciales por sus continuos ataques a todo lo relacionado con lo leonés.
«Esperamos encontrarlo todo limpio y saneado, pues ha pasado ya bastante tiempo desde que ese ser abandonó el consistorio. De todas maneras llevamos trajes especialmente diseñados para evitar contagios y si en algún momento le viésemos aparecer nos ponemos con los tambores y la dulzaina y quedaría reducido en cuestión de segundos», asegura Mamen.
El equipo de científicos emprenderá este viernes a bordo del DiscoverCyL el viaje de regreso a León, siendo la fecha prevista de llegada el próximo 5 de octubre coincidiendo con la festividad de San Froilán, la cual aprovecharán para darse un baño de multitudes ya en la capital del viejo reino.